[ Abr.2014 ] Esta es una foto de Martisor.
En Rumanía, principalmente los hombres dan a las mujeres este objeto en el primer día de marzo para celebrar la llegada de la primavera.
Está hecho de hilos rojos y blancos, flecos en ambos finales, y un accesorio central.
Las personas que lo reciben lo llevan un mes y el 31 de marzo lo atan en una rama de un árbol.
Al hacer eso, su salud su salud promete ser buena hasta el año que viene.
Una tradición muy bonita.
Encontramos esto en el jardín del monasterio de Cozia.
Este monasterio está en el condado de Valcea y por allí hay muchos monasterios, al igual que en la región de Moldavia.
Cuando visitamos la iglesia principal de Cozia, nos encontramos pinturas religiosas por toda la pared interior.
Cuando veo este tipo de iglesias, recuerdo una historia japonesa llamada Hoichi el sin oreja.