[ Abril.2013 ] Hacía muy buen clima en el puente de finales de abril, así fuimos desde Milán hasta Brescia, en el norte de Italia.
Pero el tráfico fue horrible, así que abandoné Brescia y fui a visitar el castillo de Malpaga, justo al sur de Bérgamo.
Desafortunadamente estaban celebrando un evento especial durante aquel día y no pude entrar, pero la historia del dueño de este castillo me pareció muy interesante.
Su nombre era Bartilomeo Colleoni y fue jefe de soldados contratados en el siglo XV.
El soldado contratado se llamaba ‘condottieri’ y pagaba muy bien en esos días.
Trabajó para Venecia y Milán e hizo una fortuna.
Su base era Bérgamo, pero invirtió mucho en el castillo de Malpaga como hogar, a la vez que también realizó muchos trabajos en la mejora de la agricultura.
¡Y la parte interesante es, que aparentemente tenía tres testículos! Se llamaba a sí mismo ‘Coglioni’, que significa pelotas o cojones, y su escudo de armas fue diseñado con tres bolas.
Hay este escudo de armas frente a la iglesia de Bérgamo, donde fue enterrado, y dicen que está reluciente porque la gente lo acaricia para obtener fortuna.
Iré a acariciarlo la próxima vez.
