[ Nov.2018 ] En el último día de nuestras cortas vacaciones en Lincoln, Inglaterra, fuimos a una joyería que me había llamado la atención.
La razón por la cual me interesé en este negocio es porque en la vidriera había un colgante con una hermosa piedra llamada Blue John.
Me encantas las piedras semi-preciosas pero nunca había visto una blue john.
De acuerdo con la explicación que vimos en la vidriera esta piedra solo se puede encontrar en Derbyshire, Inglaterra.
Derbyshire se encuentra a dos condados de Lincolnshire, así que se puede decir que es una piedra local.
La piedra tiene un patrón púrpura en un fondo blancuzco, es encantador.
En el negocio nos mostraron varias joyas con blue john.
Usualmente me gustan las joyas con piedras grandes pero la pequeña piedra que estaba en la vidriera tenía un patrón muy hermoso, así que compré esa.
Nos dieron un folleto, «La historia de la piedra blue john».
Según el folleto esta piedra fue descubierta por los romanos hace casi 2.000 años. La colina al este de Castleton, en Derbyshire, es el único lugar donde se pueden encontrar.
El naturalista romano Plinio el Viejo mencionó esta piedra cuando escribió «La historia natural».
En esos días los jarrones y copas realizadas con esta piedra eran muy preciados.
Luego de la época romana parecería que la gente olvidó la piedra pero en el siglo 18 un hombre de negocios, llamado Matthew Boulton, la redescubrió y, nuevamente, los jarrones hechos con esta piedra volvieron a ser preciados.
El folleto dice que hoy en día la mina está prácticamente extinta, es por esto que es casi imposible que se puedan hacer objetos grandes como jarrones. Pero todavía se pueden hacer objetos pequeños como colgantes o anillos.
Estoy muy contenta que conocí esta piedra histórica.
Luego de comprar el colgante, almorzamos liviano, y luego ya era hora de regresar a casa.
Bajamos la pendiente por última vez.
Por suerte el clima estaba lindo, así que sacamos muchas fotos hasta el final.
Antes de tomar el tren, lo último que hicimos fue ir a la peluquería para que mi marido se cortara el pelo.
Lo dije ya muchas veces, a él le gusta cortarse el pelo durante las vacaciones.
Esta vez lo hizo frente a la estación de tren en un lugar llamado Barbería Italiana, Gregorio.
Aparentemente vinieron 5 hermanos de Calabria, sur de Italia, y uno de ellos abrió la barbería.
La persona que estaba atendiendo el negocio era el hijo, su madre era inglesa.
Los hermanos estuvieron en Inglaterra por casi 60 años, pero tanto el nombre del negocio como el mapa de Calabria que hay en su interior, sugieren que sus corazones están en su país de origen.
El hijo hizo el esfuerzo de hablar italiano, con un pronunciado acento inglés, con mi marido.
Luego de eso nos tomamos otro tren de un solo vagón, que se demoró bastante.
Estábamos preocupados de perder la conexión pero finalmente todo salió bien y llegamos a casa sin problemas.