[ Mayo 2013 ] Para la primera comida en Munich en Alemania fuimos a un restaurante de cervezas llamado Weisses Breuhaus recomendado por mi guía turística.
Es una típica cervecería alemana bastante grande.
No sabíamos lo que era más tradicional pedir o lo que más bueno estaba, y queríamos pedir algún consejo a las camareras que eran todas mujeres de mediana edad.
Pero dos nos ignoraron y la tercera nos dijo ‘Tenéis que buscaros asiento por vuestra cuenta’.
La otra mujer era la responsable de servirnos, fue aún más aterradora.
Al parecer, tenía mucha prisa, no sonreía y no nos dio ni la más mínima oportunidad de obserbar el menú.
Quería preguntarle sobre la diferencia de las cervezas enumeradas en el menú, pero me miró y no contestó.
Pero hay que admitir que era muy funcional, había muchísimos clientes y no cometio ningún error.
Cuando pedimos la cuenta, nos la dio en el acto, usando una máquina que llevaba consigo misma y aquella misma máquina aceptaba las tarjetas de crédito, lo que me pareció impresionante.
Esta experiencia reconfirmó mi imagen hacia Alemania.
