[Dic.2019] En Beppu (prefectura de Oita, Japón) hicimos el «Tour del infierno».
El Tour de el Infierno consiste en visitar siete lugares llamados Jigoku (infiernos), donde surgen las aguas termales.
Cinco de ellos estaban en el área de Kannawa Onsen.
Después de ver aquellos nos quedamos satisfechos, así que decidimos ir a la estación de tren sin ver los dos Jigoku restantes.
Subimos al taxi, pero mi esposo parecía querer ver el resto.
Entonces le pregunté al taxista si merecía la pena visitarlos.
No era una persona que expresaba su opinión con decisión, pero nos dijo: «usted compró los boletos combinados, ¿no?»Así que es mejor verlos «.
Ya estábamos en camino a la estación, pero le pedimos que se diera la vuelta hacía los dos Jigoku.
Estaban bastante lejos, lo que me puso nerviosa porque el medidor del taxi no paraba de subir
Los dos Jigoku restantes eran «Chinoike Jigoku» y «Tatsumaki Jigoku», y estaban ubicados en el área de Shibaseki Onsen.
Cuando bajamos del taxi, los encontramos uno al lado del otro.
Primero, visitamos «Chinoike Jigoku» que significa «el infierno de un estanque de sangre».
Según el folleto, este es el Jigoku natural más antiguo de Japón y, como su nombre indica, era de color rojizo, aunque debido a los vapores blancos, el color era suave.
Aparentemente, producen una «pomada chinaike» que se obtiene de la arcilla roja que se genera aquí, y sirve para curar enfermedades de la piel.
En el pasado también usaban la arcilla para teñir.
Este Jigoku tenía una gran tienda de regalos, así que hicimos algunas compras.
Posteriormente, fuimos al último Jigoku, «Tatsumaki Jigoku».
Este era diferente a los demás, ya que era prácticamente solo un géiser.
Emite agua hirviendo y vapor regularmente cada 40 minutos y dura 7 minutos.
Había asientos desde los cuales el público podía verlo.
Este géiser estaba en el área rocosa, así que cuando tomé fotos, parecía una cascada, pero en realidad el movimiento del agua era hacia arriba.
El folleto dice que este géiser es famoso por sus cortos intervalos, en comparación con otros en el mundo.
Hace mucho tiempo, vi un géiser más grande en Islandia que estaba al aire libre y era mucho más poderoso.
Y recuerdo que el color del estanque era un azul increíble.
Por cierto, el folleto de este Tour del infierno contiene las palabras de Kon Toukou, un escritor que admira el infierno, lo cual es interesante, por lo que cito un par de frases: «El cielo, como lo describieron Dante, John Milton o William Brake, no me parece agradable ni interesante.
Sin embargo, encuentro que las visiones del infierno evocadas por estos maestros literarios son tremendamente interesantes.
La crueldad de los seres se expresa tan vívidamente en ellos que casi siento que preferiría ir al infierno que al cielo. »
Este fue el final de nuestro Tour del Infierno.
Este recorrido ahora es imprescindible en Beppu.
Aparentemente, un hombre de negocios local llamado Aburaya Kumahachi organizó esta trayecto en 1928, y esa fue el primer tour en autobús con un guía turístico en Japón.
El bus turístico sigue funcionando. Tal vez deberíamos haberlo cogido.