[ Junio 2017 ] La última ciudad que visitamos con con el tour de las ciudades del sur de Holanda fue Róterdam.
Allí está el puerto más grande de Europa y el número de personas que trabajan para el puerto es de hasta 250.000.
Siendo 20.000 las personas que trabajan para el puerto de Amsterdam.
Nuestro guía, Erik, nos dijo que la ciudad fue destruida casi completamente durante la segunda guerra mundial y después de aquello siguen construyendo y reconstruyendo la ciudad una y otra vez.
Dijo: «La gente aquí trabaja duro y muere joven».
Desde mi punto de vista, esta ciudad no es bonita en absoluto, no como otros lugares que visitamos.
En Gdansk, en Polonia, por ejemplo, la ciudad también fue destruida en la guerra, pero trataron de reconstruirla tal y como era antes, al menos en la superficie, pero en Rotterdam no parecían preocuparse por la apariencia de la ciudad, construyendo edificios peculiares arbitrariamente.
Uno de los ejemplos es el Cube House que fuimos a ver, que es un grupo de casas residenciales en forma excéntrica.
Había visto las fotos, pero no sabía que estaba en Róterdam.
Los cubos amarillos inclinados se acurrucan contra sí mismos.
Cada cubo es una casa residencial.
Esto fue diseñado por el arquitecto holandés llamado Piet Blom y construido en los años 80 tempranos.
Queríamos ver cómo eran por dentro, y afortunadamente había una especie de casa-museo abierto.
Pagamos € 3 cada uno para entrar y ver el interior.
Era una casa de tres plantas y el espacio en general era bastante grande, pero como estaba inclinada, había muchos rincones inutilizables.
Y debido a que las paredes y las ventanas están también inclinadas, sentí que estaba perdiendo el equilibrio.
Pero lo peor era la escalera.
Era estrecha y muy empinada.
Creo que el diseñador excluyó a niños y ancianos completamente.
No tengo ni idea de cómo pudieron poner los muebles.
Yo diría que se trata de una arquitectura en la que el diseñador practicó su idea peculiar, para la exposición y no para que la gente viva y se relaje allí.
Yo no viviría allí, ni aunque me regalasen la casa.
Junto a la Casa Cubo, había otra casa de aspecto extraño que parecía un cohete con ventanas de forma graciosa.
Dejamos esa zona y visitamos una torre llamada Euromast en Róterdam.
Fue construida en 1960 y tiene una altura de 185metros.
Cuando nos acercábamos a la torre, un miembro estadounidense del tour levantó su voz y dijo: «Mira, gente limpiando las ventanas allá arriba!».
Y efectivamente, estaban algunas personas colgando de unas cuerdas.
Pero no eran limpiadores de ventanas, era una actividad que consistía en bajar colgado de unas cuerdas desde la cima de la torre.
No lo hicimos, sólo subimos la torre para ver las vistas de Róterdam, pero para mí, lo siento decir, pero fue sólo confirmación de que esta ciudad no era preciosa incluso mirándola desde arriba.
Al oír la guía de audio en la torre, pude ver que la gente allí quería decirnos que lo bueno de esta ciudad estaba hecho de sus esfuerzos, pero probablemente no volveremos a visitar la ciudad de nuevo, a no ser que sea por un tema de necesidad.
Ese fue el final de nuestro tour de «degustación» de Holanda del Sur.
Me gustaría viajar más por el país.
