[ Feb.2015 ] El principal destino de nuestro corto viaje a Emilia Romagna en Italia esta vez fue Ravenna.
Había oído que los mosaicos allí eran maravillosos, pero eran más que maravilloso.
Ver es creer, Me sorprendió mucho su belleza.
Compramos el billete (9,50 €) con el que podíamos visitar 5 edificios que figuran en el Patrimonio de la Humanidad.
El primero fue la Basílica de San Vitale.
La comenzaron a construir en 527 cuando Ravenna estaba bajo los el imperio Godo y se terminó en 548 cuando estaba bajo Imperio Bizantino.
Y al parecer es la obra maestra de la arquitectura bizantina.
No sé nada de arquitectura, pero si dicen que la Santa Sofía en Estambul es otro ejemplo bizantino, esta basílica puede ser similar, por ejemplo, el espacio vacío en el centro y la forma en de las ventanas.
Todos aquellos cuadros de la pared fueron hechos de pedazos pequeños de piedras naturales y de vidrios, lo cual es realmente asombroso.
Mi favorito fue el mosaico de la emperatriz Theodora.
La emperatriz se representa majestuosamente.
Es aún más grande que el emperador.
