[ Nov.2014 ]
Lo que nos dimos cuenta cuando nos fuimos de compras por Monsanto en Portugal fue que sólo las tarjetas de crédito emitidas en Portugal se podían utilizar.
Además, no había cajeros automáticos en el pueblo.
Hicimos una gran compra nada más llegar al pueblo, prácticamente, así que nos metimos en un problema.
El banco más cercano estaba en la carretera principal al pie de la colina.
Cuando nos sentimos perdidos, nuestro propietario de alojamiento nos ayudó y nos dio un estímulo.
Dijo que de hecho esto es un gran problema durante la temporada alta en verano.
Porque incluso el banco más cercano a veces se queda sin dinero.
Por el camino, nos comentó que vino a Monsanto desde Lisboa hace cinco años con su familia y está muy satisfecho con la vida allí.
Él dirige una cantina, una pizzería y dos habitaciones.
Tuve la sensación de que esta familia y la de la tienda, que habíamos ido a comprar con anterioridad, son ambos nuevos residentes de la aldea y pueden que tengan un liguero distanciamiento con los aldeanos originales.
Estos dos grupos pueden estar luchando por los turistas cuyo número es limitado.
Es sólo mi imaginación, no es que haya visto ninguna evidencia.