[Diciembre.2012] En el hermoso pueblo de Verezzi en Liguria, Italia, hay tiendas fascinantes.
La primera tienda a la que fui vendía artículos bastante pequeños de Asia, incluso de Japón. El propietario era un señor de habla griega, que nos dijo que debido a la reciente recesión, sólo las buenas tiendas sobrevivian.
Allí me compré un broche de Filipinas y un pañuelo de la India.
Muchos pensareis ¿Por qué comprar estas cosas a las afueras de Italia? pero el precio era razonable y las compras que haces durante las vacaciones siempre son «Una oportunidad única», ¿No es así?
La tienda siguiente era una tienda selecta que solo vendía ropa y accesorios italianos, pero con un diseño bastante original.
Compré un bolso con forma unusual que se puede cambiar poniéndole unos ganchos y una falda inusual.
La dueña de la tienda era una mujer que se notaba que sabía vender, como muchas otras personas en Italia, era muy buena para aconsejar casualmente.