[ May, 2014 ] En el casco antiguo de San Sebastián en el País Vasco, España, se comen muchos Pintxos (aperitivos locales) en bares de las calles estrechas.
No sé cómo se las arreglan para no colapsar las entradas y salidas de los bares.
La gente local come Pintxos, de pie.
Incluso una señora mayor estaba comiendo de pie.
Pero después de caminar tanto, queríamos sentarnos, así que fuimos a un restaurante donde podíamos sentarnos.
Y como esperábamos, había un montón de turistas.
La comida era muy buena, aunque.
Era un fin de semana, y las calles estaban muy muy llenas.
También había artistas callejeros.
En la iglesia principal, una boda acaba de terminar y la pareja recién casada estaba saliendo de la iglesia, los invitados que esperaban fuera, tiraban sobre la pareja un montón de confeti y arroz (como podéis ver aquí).
Tanto es así que la novia frunció el ceño.
Cuando miré hacia la iglesia, encontré la estatua de un santo con muchas flechas y algo voluptuoso.
Me preguntaba quién era … pero por supuesto era el santo San Sebastian.