[Diciembre, 2011] Este no es el pasillo de los vestuarios de una piscina, sino un pasillo de un hotel en el que nos quedamos en Lisboa, la capital de Portugal.
Elegimos este hotel porque está ubicado justo en el centro y me atrajo página web bastante.
Pero la habitación era muy pequeña y en la segunda noche, el baño olía tan mal que me sentí un poco enferma.
Pero, por otro lado, el hombre de recepción cuando salimos fue muy amable.
Me dijo a dónde deberíamos ir y qué no nos deberíamos perder en mi próximo destino, buscando sitios web.
Pude sentir que él hizo esto por nosotros, no porque fuera su trabajo, sino voluntariamente, quería ayudarnos.
Fue reconfortante.
El nombre del hotel es Evidencia Tejo.