[ Nov.2014 ] El conductor del taxi que nos llevo de ruta por Monsanto, Portugal, era Manuel.
Era una persona mayor y un poco excéntrica, vestida con un uniforme de camuflaje.
Tenía fotosde la gente que no le gustaba en la parte delantera de su viejo Mercedes.
Aunque no nos podíamos comunicar con el muy bien que digamos, nos pidió que le hiciésemos una foto posando junto a un tanque en Penha Garcia, el primer pueblo que visitamos.
Los encargados de la oficina de turismo de Monsanto le mostraron la ruta por la que nos tenía que llevar, pero el la ignoró.
El segundo destino fue su casa.
Su mujer y su hija salieron a darnos la bienvenida, nos dieron a probar su licor casero, el cual estaba delicioso.
Esta foto, muestra la figura de una mujer, de la que él estaba orgulloso…
La niña, que sabía hablar inglés, nos dijo: «El me llama enfermera».
Parece se que tenían personajes en casa.
En el camino de vuelta a Monsanto, paramos el coche en un punto donde se podía ver la colina de frente, en ese momento él se jacto de lo hermosas que eran las vistas.
Pude ver que estaba muy orgulloso de su tierra.
Si nos hubiesemos podido comunicar, todo hubiese sido más interesante.