[ Junio 2017 ] Continúo hablando de la Carrera Urbana de Rotos «Urban Photo Race» (UPR) a la que nos unimos en Amsterdam en los Países Bajos.
Se trata de un tipo de concurso de fotos, en el que se hacen fotos durante un día entero, de acuerdo a los temas que te proporcionan, y los dos temas dados en la reunion de la 1:00 en punto fueron: ④Ruido ⑤Lenguaje corporal.
Cada vez era más difíciles.
Y teníamos hambre.
En este tipo de eventos, se camina alrededor de la ciudad buscando los temas para hacer fotos, pero al mismo tiempo, de manera natural, también miramos algo que nos pareciese apetecible para comprarnos.
En el día en Amsterdam, elegimos una casa de bistec argentino llamada Tango para la hora de la comida.
Me había dado cuenta antes de que por alguna razón había muchos restaurantes argentinos como éste en Amsterdam.
No puede ser que sea porque la reina de este país es argentina, ¿Verdad?
Pedí un bistec de 200 g (filete) y mi marido tenía 300g de solomillo.
La carne era buena, pero el único problema era que el camarero no era demasiado agradable.
De todos modos, nuestros estómagos estaban satisfechos, así que caminamos hasta el siguiente lugar de reunión, mientras hacíamos fotos.
Los lugares de reunión se trasladaron hacia la Estación Central, centro de la ciudad, donde acudieron muchísimas personas.
Al mismo tiempo, hacía cada vez más calor.
Salimos a la plaza de Rembrandt donde hay una enorme estatua del pintor, y muchas estatuas de bronce de la escena de su obra maestra ‘La Vigilancia Nocturna’.
Cerca de allí, había un puestecillo de venta de accesorios que llamó mi atención.
Eran colgantes de macramé y en ese momento un hombre estaba haciendo uno.
Dijo que la piedra interior era de América del Sur y porque como ya había visto obras similares en Colombia, pensé que por lo tanto el era sudamericano.
Pero cuando le pregunté, él dijo que él era un indonesio, lo cual me sorprendió bastante.
Por supuesto, Indonesia solía ser una colonia de los Países Bajos, así que probablemente todavía tienen la estrecha relación.
Cuando le dije que yo era japonesas, su madre salió y me dijo que su abuelo era japonés.
Y ella continuó: «En aquellos días, Japón era tan fuerte que mi abuela no podía rechazarlo».
Escuchando aquello, tuve un sentimiento mixto, pero decidí dejarlo pasar y compré el colgante más elaborado sobre la mesa, ya que era el que más me gustó.
En la reunión de las 4 de la tarde, nos dieron el último tema, ⑥ Cálido.
Tenía mucho calor en aquel momento, pero pensé ‘caliente’ y ‘calido’ son diferentes.
Y sin saberlo, nos encontrábamos en el famoso barrio rojo y vimos a algunas mujeres en las ventanas.
No me sentí especialmente cómoda andando por allí, así que después de un rato, decidimos volver al hotel.
En el hotel, elegimos las fotos que queríamos presentar (tres por cada tema) y las pusimos en un pen drive y salimos de nuevo al punto de encuentro para presentar las fotos.
No lo sabíamos, pero para llegar al sitio donde debíamos reunirnos, teníamos que coger un barco desde detrás de la estación central.
El viaje en barco fueron sólo unos 5 minutos y donde nos dejó era la zona recién desarrollada, con edificios modernos.
Vimos muchos participantes trabajando en sus fotos con sus ordenadores.
Estaban serios, mucho más que el Photomarathon italiano al que habíamos asistido unas cuantas veces.
El personal nos dijo que el número de participantes fue de 140.
Después de presentar nuestras fotos y sentirnos aliviados, nos bebimos una copa de Cava español en una cafetería cercana.
En Inglaterra, el prosecco italiano es tan popular hoy en día, pero en Amsterdam, nunca vimos uno y sólo tenían Cava.
En su historia, los Países Bajos, tenían una estrecha relación con España, ¿No?
Me pregunto si es por eso que tienen Cava en lugar de Prosecco.