[ Mar.2016 ] A la mañana siguiente, visitamos la Villa Ogimachi en Shirakawago, Japón, que está catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Llevábamos todo lo que teníamos pensando ya que pensamos que haria frío, pero de hecho nos hizo buen día, y un clima muy cálido.
Dejamos nuestro equipaje en la oficina de información turística y nos dirigimos al observatorio para ver el pueblo desde arriba, subiendo las destartaladas escaleras.
Era una vista encantadora con las casas con los tradicionales y grandes techos de paja empinados llamados Gassho, pero al mismo tiempo noté que había muchas casas comunes, también.
Según el folleto que compré, las casas Gassho son 114 y hay 329 casas no Gassho.
Más de 600 personas viven en el pueblo.
Se ayudan mutuamente para la cosecha del arroz, para cambiar el techo y así sucesivamente.
Al parecer, cambiar el techo es un gran trabajo.
Se tarda tres días para quitar el techo viejo y un día para construir el nuevo techo.
El pueblo en sí es como un museo.
Había muchos turistas cuando estuvimos allí, probablemente la mitad de ellos eran gente no japonesa.
Pensé que era difícil para los aldeanos seguir viviendo su propia vida cotidiana entre tantos turistas.