[Ene.2017 ] Nuestro nuevo año, el 2017 comenzó en Medellín, Colombia.
Fue un buen día.
Nuestra guía, María, nos llevó al aeropuerto.
En el camino de ida, encontramos un punto con muy buenas vistas de Medellín, ella nos hizo algunas fotos con su teléfono móvil, diciendo: “ son para mi recuerdo”
Pense que era muy amable por su parte.
A ella le encanta viajar y nos contó que le gustaría ir a Tailandia algún día.
Nos separamos después de abrazarnos en el aeropuerto.
Tuvimos un vuelo corto a Cartagena, una ciudad frente al Mar Caribe en el norte del país.
La altitud era baja, ya que se encuentra frente al mar y la temperatura era de mediados de verano.
Nos alojamos allí durante tres noches y nuestro hotel se llamaba Bóvedas de Santa Clara en el casco antiguo de la ciudad, era precioso y elegante.
Había incluso una pequeña cocina en la espaciosa y blanca habitación, en la que nos alojamos.
Y tuvimos que esperar durante mucho rato antes de que alguien viniese a hacer el trabajo, después de ello nos quejamos varias veces a la recepción.
Cuando llegamos a Colombia 10 días antes, el agente de viajes local nos dio algunos documentos, y entre tanto dijo: “Ahora estáis en América del Sur. Por favor, sed pacientes” y esta fue una ocasión en la que tuvimos que ser muy pacientes.
De todos modos, este primer día, dejamos nuestro equipaje en la habitación, y nos fuimos a pasear por la ciudad.
Algunas tiendas y restaurantes estaban cerrados el día de Año Nuevo, pero no nos cansamos de caminar en esta colorida ciudad.
Creo que esta fue la ciudad más turística que visitamos en Colombia.
Las casas estaban pintadas de muchos colores y habían muchas flores y plantas.
Más tarde nos enteramos de que tienen una “competición de casas” cada año en la ciudad, lo que hace que se mantenga más bonita.
Camine con buen ánimo haciendo muchas fotos, pero mi marido no se encontraba tan bien y cuando volvimos al hotel me pareció que tenía algo de fiebre.
Estar enfermo durante las vacaciones te hace sentir impotente.
Por supuesto teníamos seguro de viaje, pero primero pensé que tenía que buscar un médico…
Así que pasamos una noche preocupante, pero afortunadamente, la mañana siguiente, él estaba completamente recuperado.
Me tome aquello como una advertencia de que tenemos que estar preparados para la enfermedad inesperada o lesión en cualquier momento durante el viaje.
