[ Junio. 2014 ] El hotel en el que nos alojamos en Cortona en la Toscana italiana era el Hotel San Michele frente a la pendiente empinada en el casco antiguo de la ciudad.
Desde el exterior, parecía viejo e histórico, y de hecho fue un lugar histórico.
No sólo yo, pero probablemente muchos huéspedes preguntarn sobre la historia, así que habían preparado una hoja de papel titulada «La historia».
Según esta infomación, este lugar era una parte del muro de la ciudad en el siglo XI, pero se convirtió en una mansión de un marqués en el siglo XII.
Y luego, en 1206, se convirtió en un lugar público que funcionó como un tribunal.
Pero alrededor de 1410, la república florentina donó este lugar a la familia Baldelli y desde entonces se había llamado el palacio de Baldelli.
Allí la Academia Etrusca, cuyo objetivo era difundir el conocimiento de la cultura etrusca, fue fundada en el siglo XVIII y tuvieron reuniones en el Palacio.
Una mujer en el hotel nos dijo que los miembros de la Academia estudiaban por las noches.
Probablemente en 100 años, alguien estará diciendo «este lugar un día fue un hotel».